Nota servida por la Oficina Coordinadora de Prensa de la Oficina de Gestión Senatorial de Espaillat.
MOCA.- Con otro manjar espiritual y la hermosa música del Orfeón de Santiago, siguen los conciertos navideños patrocinados por la Oficina del Senador de Espaillat, José Rafael Vargas, y el Ministerio de Cultura presidido por José Rafael Lantigua.
Como parte de estas celebraciones la Iglesia del Rosario se vestirá de gala este miércoles 14 de diciembre a partir de las 8:00 de la noche, acogiendo a un mocano de pura cepa como es el sacerdote Cesar Hilario y su Orfeón para ponernos a vibrar con su coral durante más de una hora con canciones populares, clásicas y religiosas.
El senador Vargas destacó, “Preparemos nuestros oídos y nuestros corazones, para disfrutar de otro gran banquete musical con el cual nos deleitaremos en otra noche extraordinaria para nuestra provincia”.
El Orfeón de Santiago viene con un repertorio totalmente renovado que incluye las piezas Jubilate Deo de Domenico Bartolucci, Va Pensiero de Verdi, “Balada del Pobre” de César Hilario, “Sortilegio” de Cuto Estévez, “Por Caridad” de Rafael Solano, “Te Quiero” de Mario Benedetti, entre otras que podrán disfrutar todos los presentes al concierto.
Asimismo el senador Vargas, detalló que el primero de estos conciertos fue en Jamao con la Orquesta Dominicana de Vientos, siguiendo la Suite Cascanueces en la explanada del Museo Ramón Cáceres, reventando ambos escenarios en el inicio de este programa de actividades que tiene la Oficina Senatorial de Espaillat en el mes de diciembre.
De la misma forma señaló que los mismos siguen este miércoles 14 de diciembre en la Iglesia del Rosario con el Orfeón de Santiago, el jueves 15 en Cayetano Germosen, el sábado 17 en Gaspar Hernández y para cerrar el miércoles 21 en la Iglesia Sagrado Corazón de Jesús en Moca.
“Navidad es una época para ver a los demás con los ojos del corazón y abrirnos al servicio, a la solidaridad, al compartir, a la generosidad del señor que se presentó pequeño, pobre y humilde, recostado en un pesebre porque no había lugar en la posada”.